Álvaro de Lamadrid comparó la actitud del actual oficialismo con la del kirchnerismo en los años en que se buscaba proteger a los operadores vinculados al régimen de Nicolás Maduro.
“Así como el kirchnerismo rogaba que el testaferro del régimen de Maduro, Álex Saab, el exespía Pollo Carvajal y Claudia Díaz, la enfermera de Chávez, no hablaran sobre el financiamiento narco, hoy los Milei imploran que tampoco hable Fred Machado”, afirmó De Lamadrid.
El dirigente hizo referencia a las declaraciones del empresario argentino Fred Machado, detenido y acusado de lavado de dinero y narcotráfico, quien advirtió que “si hablo, se cae el país”, una frase que, según De Lamadrid, “revela hasta qué punto el poder teme a la verdad”.
El caso fue revelado por el diario Perfil, que detalló que Machado habría amenazado con exponer vínculos entre sectores del gobierno libertario y operaciones financieras irregulares.
El patrón del silencio
De Lamadrid sostuvo que el “mecanismo del silencio” se repite con distintos gobiernos y distintas ideologías. “Ayer pedían que Saab, Carvajal o Claudia Díaz callaran sobre el dinero sucio del chavismo; hoy temen lo que pueda contar Machado sobre el financiamiento de la política local”, señaló.
“El silencio vuelve a ser la moneda de cambio del poder. Cambian los nombres, cambian los discursos, pero el método es el mismo: callar para proteger los negocios del poder”, añadió Álvaro de Lamadrid.
Transparencia o encubrimiento
Para De Lamadrid, el caso pone a prueba la independencia de la Justicia y la credibilidad del gobierno nacional. “No hay República si las causas se frenan por temor a que caiga un gobierno. El país no se cae porque alguien hable; se cae cuando todos callan”, afirmó.
El dirigente recordó además que durante años denunció los vínculos del kirchnerismo con redes de financiamiento provenientes del chavismo, y consideró que “hoy se repite el mismo libreto, con otros protagonistas, pero con el mismo silencio cómplice”.
La corrupción no tiene ideología
En el tramo final de su declaración, De Lamadrid advirtió que tanto el kirchnerismo como el actual oficialismo “se amparan en la excusa de la estabilidad para silenciar verdades incómodas”.
“En Argentina no faltan los que dicen ‘si hablo, se cae el país’; sobran los que prefieren que nadie hable. La corrupción, como la cobardía, no tiene ideología. Y la libertad se defiende con verdad, no con miedo”, concluyó.