El Grupo Municipal VOX Málaga ha impulsado una campaña frontal contra la entrada en vigor, del 30 de noviembre, de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE), una ordenanza que, según denuncian, carece de fundamento ambiental, responde únicamente a intereses recaudatorios y perjudica gravemente a los malagueños con menos recursos.
Ya, el pasado lunes, se inició una la campaña con una pegada masiva de carteles, a la que se ha sumado el buzoneo selectivo, despliegue de pancartas y una caravana de vehículos que ha partido este sábado, a las 12:00 horas, desde el aparcamiento del Palacio de Deportes Martín Carpena. En ella han participado conductores afectados de Málaga capital y municipios de la provincia.
Afán recaudatorio
Para Antonio Alcázar, portavoz del Grupo Municipal VOX Málaga “no hay pruebas de contaminación, pero sí un enorme afán recaudatorio”
Alcázar, ha advertido del carácter “injusto y no científico” de la ZBE destacando que “mañana entra en vigor la zona de bajas emisiones, una medida que pretenden imponer en nuestra ciudad y que no es ambiental, ni justa, ni basada en la ciencia”, señalando que “es simplemente una decisión política injustificada que castiga a los malagueños y fractura la igualdad entre ciudadanos”.
El edil ha denunciado la ausencia de estudios técnicos que justifiquen restricciones tan severas, “en el expediente municipal no existe una sola prueba medioambiental seria que acredite que Málaga tenga un problema real de contaminación”, añadiendo que “no hay mediciones contrastadas, no hay estudios técnicos independientes, no hay informes que justifiquen el cierre de calles o la restricción al tráfico”.
A ello se suma importantes costes económicos para la ciudad con gastos millonarios en cámaras y controles, un total de seis millones de euros, a los que hay que sumar la previsión de ingresos en multas, que se espera que supere los 11 millones de euros al año.
El portavoz recordó que los tribunales ya han anulado ZBE similares en varias ciudades, “en Barcelona, Madrid, Gijón, Segovia o Ávila han tumbado ordenanzas idénticas por falta de base científica y proporcionalidad. Málaga no necesita repetir estos errores”.