El Grupo Municipal VOX Málaga ha presentado una moción en la Comisión de Pleno de Derechos Sociales, Vivienda, Participación Ciudadana y Cultura para que el Ayuntamiento asuma un papel activo en la protección, exposición y divulgación del valioso patrimonio arqueológico redescubierto durante las obras de ampliación del metro.
La propuesta, defendida por el portavoz de la Formación, Antonio Alcázar, insta al equipo de gobierno local a publicar un catálogo detallado de los restos hallados, colaborar con la Junta de Andalucía para integrar este legado en la red de metro, y permitir la participación ciudadana en el diseño del futuro espacio museístico.
Hallazgos en las obras de la línea 1 y 2 del metro
Hay que recordar que durante las obras de las líneas 1 y 2 del metro, se han producido descubrimientos de gran valor histórico, como una necrópolis romana en la calle La Unión, almacenes romanos en Santa Marta, murallas almohades en El Perchel y, recientemente, varias tumbas romanas en calle Hilera.
“Estos hallazgos no son meras curiosidades arqueológicas, son fragmentos de la historia de Málaga que deben ponerse al servicio del presente y del futuro”, ha declarado Antonio Alcázar.
“No podemos permitir que nuestro patrimonio duerma en cajas o almacenes. Málaga tiene derecho a disfrutarlo, conocerlo y sentirse parte de él. Existen ejemplos admirables en Madrid, Estocolmo o Ciudad de México; ¿por qué no Málaga?”, ha añadido el portavoz.
Desde GM VOX Málaga denunciamos que el proyecto museístico previsto por la Junta de Andalucía, adjudicado en 2023, “sigue sin materializarse y se ha quedado corto ante la magnitud del patrimonio hallado”.
Por ello, reclamamos que el Ayuntamiento se implique con decisión para que las estaciones del metro puedan convertirse en una red cultural viva, accesible para todos los ciudadanos.
Museos de este tipo en otras ciudades
La moción subraya que este tipo de iniciativas ya funcionan con éxito en ciudades como Madrid, Barcelona, Estocolmo o París, donde el metro se ha convertido en un espacio para la divulgación del arte, la historia y la identidad local.
“No se trata solo de conservar, sino de dar vida al patrimonio, integrarlo en la rutina urbana y transformarlo en un motivo de orgullo para los malagueños”, concluyó Alcázar.