La portavoz y diputada de VOX en la Junta General, Carolina López, en el turno de ‘Preguntas al Presidente’ que tuvo lugar hoy en el Pleno de la Junta General del Principado formuló la siguiente cuestión:
“¿Va usted a hacer algo para evitar que los más de cuarenta mil asturianos perceptores del SMI se vean afectados por la decisión del Gobierno de someterlo a retención y gravamen?”.
Y, a continuación, realizó la siguiente intervención:
Señor Barbón, ahora vamos a contar verdades. Los que venían a subir los impuestos a los ricos, los que venían a velar por las clases medias y trabajadoras, y fíjese, que son los que siempre, hacen caja a base de explotar al trabajador y al empresario.
Es lamentable y triste que hoy estemos debatiendo sobre el salario mínimo interprofesional. Y digo lamentable porque si estuviésemos en una sociedad realmente progresista y reformista, en Asturias, sólo en Asturias, no tendríamos al 10% de la población ocupada viviendo gracias y a duras penas por el salario mínimo. Cada vez más personas cobran el SMI por culpa de las políticas socialistas.
En Asturias las tres banderas de las políticas socialistas: LLingüa, Subvención y ‘Climatismo’ han provocado tres realidades dolorosas: Desindustrialización, Deslocalización y Empobrecimiento.
Sus políticas han supuesto el fin de la minería, el cierre de las térmicas y de grandes industrias como Alcoa, Danone, Vesuvius o chupachups provocando la pérdida de miles de puestos de empleo remunerados muy por encima del salario mínimo interprofesional.
Miles de puestos de empleo, miles de personas que o se han ido de la región buscando un futuro mejor o se han tenido que conformar con empleos precarios y temporales con salarios mínimos porque no les queda otro remedio.
Asturias es una de las regiones con la fiscalidad más cruel para las rentas medias y bajas.
La vía fiscal asturiana hace que los trabajadores que cobran el mínimo sean los segundos más perjudicados de toda España, recibirán un 16% menos que la media nacional.
Resulta que su querida Montero sube 700 euros al año el salario mínimo y lo somete a gravamen y retención. Ya son ricos. La subida al mes que percibirá el trabajador será de unos ridículos 25 euros, ni para una barra de pan al día gracias a la vía fiscal. Es más, la subida no compensa la inflación.
En Asturias, los 700 euros de subida del SMI van a suponer casi 1.000 euros al año de coste empresarial adicional mientras el trabajador percibirá poco más de 300 euros y el Estado, entre lo que le quita al trabajador y lo que le cobra de más al empresario, recaudará más de 600. Matemáticas socialistas con resultados comunistas. 300 euros para el trabajador y más de 600 para la saca estatal. ¿Quién recauda, quien explota, quien roba al trabajador, la administración o el empresario?
Y toda esa recaudación, ¿para qué? Para regar a sus sindicatos. ¿Dónde están defendiendo a los trabajadores más vulnerables? A sus chiringuitos: la llingua, el banco de tierras, diversidad sexual, LGTBI, desmemoria histórica, Agenda 2030, a los ecotóxicos, a los menas e inmigrantes ilegales alojados en hoteles 4 estrellas con todo incluido o a las asociaciones que van a empoderar a las mujeres en Nicaragua o Honduras.
¿Sabe cómo se empodera y se siente uno libre? Teniendo un sueldo que le permita vivir sin que el Estado, la administración, le meta un sablazo por trabajar. Esto no es un impuesto a las rentas, es un impuesto, una tasa por trabajar. Da igual lo que cobres: Si trabajas, pagas. Castigan al trabajador y al empresario para premiar al vago. Sólo quieren recaudar para recolocarse en todos los organismos públicos inservibles que han creado estos 40 años. Ahí se va el dinero, mientras las obras las anuncian para disimular pero no las ejecutan o como mucho parchen un bache de una carretera.
En fin, mientras Asturias cae en producción y competitividad crece su red clientelar que es la única beneficiaria del estado de bienestar a costa de los asturianos.
Sostener todo este entramado cada vez mayor tiene un coste que ha provocado que tengamos una fiscalidad asfixiante que ha rebasado la última frontera de lo admisible: gravar el Salario Mínimo Interprofesional con la poca vergüenza de llamarlo Pedagogía Fiscal.
La vía fiscal asturiana es un robo, un atraco, y una estafa que no va a mantener los servicios públicos.
Han convertido la administración pública en una especie de empresa piramidal engañando a las bases para sostener a una clase privilegiada elegida por la casta política que representan los socialistas.
Vergüenza debería darles. Ustedes representan un progresismo selectivo. Progresan sus elegidos explotando vía impuestos a los trabajadores, autónomos y empresarios. Aprovechen porque en 2 años el chollo, si depende de VOX, se les termina. En dos años serán los trabajadores los premiados, y los vagos como ustedes los que tendrán el mayor castigo que puede recibir un socialista, que es ponerse a trabajar. Pero estén tranquilos, si de VOX depende tendrán empleo y no tendrán que hacer malabares para ver cómo pagan impuestos ó cómo llegan a final de mes; y tendrán unos servicios públicos dignos porque derogaremos leyes que impiden el crecimiento económico y eliminaremos todo ese gasto superfluo de direcciones generales y organismos públicos que nos cuestan millones de euros al año.