El diputado autonómico de VOX en las Cortes de Aragón, David Arranz, ha criticado duramente el modelo económico y social actual durante una reciente intervención, señalando el contraste entre el abandono a los jóvenes españoles formados y el alto coste que suponen los menores extranjeros no acompañados (menas) para las arcas públicas.
“Lo que no es de recibo es que nuestros jóvenes titulados tengan que marcharse al extranjero a buscar trabajo, mientras cada mena le cuesta al contribuyente entre 3.700 y 4.000 euros al mes”, afirmó Arranz, apuntando a la existencia de un sistema “que va mal” y que, a su juicio, “se ha convertido en un negocio”.
En su intervención, Arranz puso de relieve la necesidad de reordenar las prioridades del gasto público y defender el principio de justicia intergeneracional. “Para repartir riqueza, primero hay que crearla”, sentenció, aludiendo a la carga que soportan los autónomos y pequeños empresarios.
“En Aragón, el 94 o 95% del tejido empresarial son pymes o microempresas, muchos de ellos autónomos con uno o dos empleados. Esa gente no es rica, abrir la persiana cada día les cuesta mucho”, explicó el diputado, en defensa del sector productivo que sostiene la economía regional.
Arranz también ironizó sobre el lenguaje inclusivo, defendiendo el uso del español correcto y directo: “Yo hablo español. Si tengo que decir empresario o empresaria, niño o niña, acabamos desnaturalizando el idioma”, concluyó.