El portavoz de VOX en el Parlamento de Andalucía, Manuel Gavira, ha afirmado con rotundidad que su formación se presentó a las elecciones autonómicas “para gobernar, transformar y cambiar Andalucía”, dejando claro que la voluntad de VOX es asumir responsabilidades reales de gobierno con coherencia y principios.
“¿Cómo que nos presentamos para no gobernar? ¿Esto qué es?”, respondió Gavira ante insinuaciones sobre una supuesta falta de ambición institucional. “Nosotros para gobernar Andalucía, para cambiar Andalucía, para transformarla, tenemos que gobernar”, recalcó.
El portavoz ha recordado que VOX alcanzó en su momento un acuerdo con el Partido Popular, pero que dicho acuerdo no fue cumplido, lo que obligó a la formación a tomar una decisión difícil pero coherente: abandonar los gobiernos en los que participaba en varias comunidades autónomas.
“¿Qué hacemos? ¿Nos quedamos y hacemos lo que hace el Partido Popular, que promete una cosa y después hace otra? Nosotros no somos así. Nosotros nos sacrificamos y fue muy duro”, expresó Gavira, visiblemente molesto ante las críticas que minimizan esa decisión.
También ha querido poner en valor el esfuerzo de muchas personas que, desde toda España, se implicaron para formar parte de esos gobiernos, y ha lamentado que el Partido Popular terminara aceptando “las políticas de fronteras abiertas que vienen de Bruselas”.
“Antes que sillones, elegimos principios. Y nos fuimos. Y fue muy doloroso para todos nosotros”, sentenció.
Frente a quienes trivializan esa salida de los gobiernos autonómicos, Gavira aclaró:
“Esto no fue una fiesta. Eso fue lo que hicimos nosotros. Y cuando llegue el Gobierno de Andalucía, habrá que ver lo que dicen los andaluces”.
En ese sentido, reiteró el compromiso firme de VOX con la voluntad popular:
“Nosotros no le vamos a faltar el respeto a los andaluces. Veremos el resultado y luego decidiremos”.
VOX insiste así en que su objetivo es claro: gobernar para transformar profundamente Andalucía, pero siempre con principios firmes, sin renunciar a su identidad ni someterse a imposiciones externas o cálculos partidistas.