El presidente de Vox en Gerona, Alberto Tarradas, y el concejal del partido en el Ayuntamiento, Javier Domínguez, han denunciado la “grave situación de inseguridad” que, según han afirmado, vive la ciudad coincidiendo con el inicio de las Fires de Sant Narcís. Ambos dirigentes han alertado sobre una “ola de violencia contra las mujeres sin precedentes”, tras conocerse en los últimos días varios casos de agresiones ocurridas en las inmediaciones de la estación de tren.
Durante la comparecencia, Tarradas ha asegurado que “dos inmigrantes subsaharianos se han dedicado a tocar y escupir a mujeres, llegando incluso a agredir a una menor de apenas cinco meses”. El líder provincial ha calificado estos hechos de “barbaridad” y los ha atribuido directamente a las “políticas de fronteras abiertas” impulsadas —según sus palabras— “por el bipartidismo y el separatismo tanto en Girona como en el conjunto de Cataluña”.
Asimismo, Tarradas ha criticado la “pasividad institucional” ante estos sucesos:
“Salvador Illa decía que en Cataluña quien la hace la paga, pero la realidad es que quien la hace recibe una paga”, ha manifestado. Tarradas ha denunciado que los presuntos agresores “fueron detenidos, puestos en libertad al día siguiente y volvieron a reincidir”, reclamando una “respuesta firme” por parte de las autoridades.
Por su parte, Javier Domínguez ha cargado contra el alcalde de Girona por “mirar hacia otro lado” ante el incremento de la inseguridad en la ciudad.
“Mientras el alcalde se preocupa por enviar 40.000 euros a Palestina, las mujeres de Girona no pueden caminar seguras por sus calles”, ha denunciado el concejal, reclamando al consistorio “acciones reales para proteger a las vecinas y recuperar el control de los barrios”.
Ambos representantes de Vox han expresado su preocupación ante las celebraciones de las Fires, advirtiendo del riesgo de que “puedan producirse nuevos casos de violencia o agresiones sexuales” si no se adoptan medidas contundentes.
Finalmente, Tarradas ha reafirmado la posición del partido frente a esta problemática:
“Queremos condenas duras, prisiones incómodas y deportaciones masivas. No hacen falta puntos lilas, hacen falta leyes firmes que devuelvan la seguridad a nuestros barrios y a las mujeres de Girona”, ha concluido.