El presidente provincial de VOX Melilla y portavoz del Grupo Mixto, José Miguel Tasende, ha destacado, en vísperas del Día de nuestra Patrona, que “celebrar la Virgen de la Victoria es un acto de afirmación de Melilla como parte de la Hispanidad”.
“La Virgen es solo una, bajo muchas advocaciones. Con su santa Patrona, Melilla forma parte señalada de la gran familia hispana, repartida por todo el mundo. Nuestras creencias, nuestras tradiciones nos hacen partícipes de una realidad mundial. Celebrar la Virgen de la Victoria es un acto religioso, pero también un acto de afirmación de Melilla como parte de la Hispanidad”, dijo.
Parte la Hispanidad
Tasende se refiere a que este 8 de septiembre coincide la celebración de la Virgen de la Victoria con la vigilia en honor a la Virgen de Caridad del Cobre, (Cachita), patrona de Cuba; con las fiestas en honor a Nuestra Señora de la Asunción, patrona de Paraguay, y con el Día de Nuestra Señora de Luján, protectora de Uruguay.
“La Virgen de la Victoria lleva siglos protegiéndonos del peligro. A ella nos encomendamos, desde hace cientos de años, en los momentos difíciles, como éste que atraviesa nuestro país, sin rumbo y sin certezas. A ella le pedimos que nos dé fuerzas para enfrentar en Melilla las amenazas externas y que nos dé temple para no desviarnos del camino elegido para ayudar a nuestro pueblo. Le pedimos que nos guíe para sacar a Melilla de la crisis económica que vive, para parar la emigración de nuestros jóvenes y para conseguir que las empresas crezcan, arraiguen y florezcan en nuestra ciudad”.
El objetivo marcado
“El nombre de Victoria, que lleva nuestra Santa Patrona, coincide con el objetivo que nos hemos marcado. Por eso en días como el de este 8 de septiembre, agradecemos la protección de la Virgen y animamos a todas los melillenses a acompañarla en los actos litúrgicos organizados en su honor”, dijo Tasende.
“La Virgen de la Victoria no es solo nuestra Patrona, sino también un símbolo de unidad y esperanza. Bajo su manto se han criado generaciones de melillenses que han visto en ella la guía espiritual de la ciudad. Su imagen nos recuerda que la fe puede ser motor de compromiso y de superación, y que en torno a su festividad se fortalece el sentimiento de pertenencia a nuestra tierra y a nuestra historia compartida”.