VOX Gijón ha pedido hoy, a través de su portavoz y concejal, Sara Álvarez Rouco, no “demonizar” a las Viviendas de Uso Turístico (VUT) en la ciudad ni culpabilizar a los propietarios del problema de la escasez de vivienda en el mercado de alquiler.
“La moratoria relativa a las VUT en Gijón no tendría que servir de pretexto para ‘demonizar’ esta actividad. Evidentemente, estamos de acuerdo en que debe llegar lo antes posible una normativa actualizada para que todo el mundo sepa a qué atenerse, pero, entre tanto, los propietarios de estas VUT que cumplen con la legalidad merecen todo el respeto”, dijo.
Por ello “no entendemos -prosigue Álvarez Rouco- a cuento de qué hay que culpabilizarlos de todos los males inmobiliarios, especialmente del problema de la escasez de vivienda en el mercado de alquiler. Debemos recordar que las VUT en Gijón son solo 1.505 frente a los muchos miles de pisos que sus dueños mantienen cerrados, algo, por cierto, que tampoco es reprochable ya que cada uno hace lo que quiere con sus propiedades siempre que se respete la ley”.
En este sentido, desde VOX “ya hemos repetido muchas veces -recordó la edil- que la pregunta sobre el motivo por el que los propietarios no alquilan sus inmuebles desocupados hay que trasladársela al gobierno socialista, el impulsor de esa ley cargada de sesgo ideológico socialcomunista que deja a los arrendadores indefensos y abocados a pérdidas económicas ante posibles arrendatarios en situación de vulnerabilidad sobrevenida, por ejemplo”.
En este asunto “cargado de polémica” de las VUT “hay que tener claro, sobre todo, que el mercado es libre y se equilibra solo. Únicamente cuando es intervenido por los gobiernos, como tememos que hagan ahora, va a peor”, advierte Sara Á. Rouco.
La portavoz de VOX Gijón considera que no debe olvidarse que “una porción de los turistas elige estas VUT porque les interesa, mientras otros se deciden por los hoteles sin que nadie proteste. Estamos convencidos que lo más importante es que la oferta sea variada y de calidad, que nadie se crea con derecho a acaparar el mercado a base de denostar y hacer campaña contra sus competidores”.
Y, mientras tanto, “a ver si el gobierno asturiano cumple con sus promesas poniendo en circulación todas las viviendas de protección oficial comprometidas. Que se note que ponen algo de su parte y que contribuyan a aliviar la tensión inmobiliaria en el ámbito de lo que les compete”, concluyó Sara Á. Rouco.