Javier Jové: «Santa Cristina de Lena, símbolo milenario, víctima del desprecio institucional».
El diputado de VOX en la Junta General Javier Jové ha denunciado hoy la “chapuza” en la ejecución de las obras de acceso a la iglesia de Santa Cristina de Lena, un monumento prerrománico del siglo IX declarado Patrimonio de la Humanidad.
“Es el primer monumento que ven los visitantes que llegan en coche a Asturias, nuestra carta de presentación. Santa Cristina es un monumento excepcional, una iglesia única, y lo que han hecho es un pastiche que degrada el entorno de un símbolo emblemático de la Asturias milenaria”, afirmó Jové, quien visitó el templo acompañado del coordinador de VOX en Lena, Manuel Antonio González.
Un proyecto mal ejecutado y abandonado
El parlamentario recordó que en septiembre de 2024 el Ayuntamiento solicitó permiso para arreglar el camino de acceso a la iglesia, y que en octubre de ese mismo año obtuvo la autorización. Sin embargo, “en febrero de 2025 la guardesa de Santa Cristina denunció la deficiente ejecución de las obras”, lo que derivó en un requerimiento de la Consejería de Cultura el 10 de marzo de 2025.
Ese requerimiento obligaba al consistorio a:
- Presentar un proyecto de obra en un plazo de 10 días,
- Subsanar las deficiencias,
- Retirar los excesos de zahorra,
- Colocar tierra vegetal con césped,
- Garantizar el drenaje mediante badenes.
“Han transcurrido ya siete meses y no se ha hecho absolutamente nada. La Consejería mira para otro lado mientras el Ayuntamiento incumple todas y cada una de las exigencias”, reprochó Jové.
Crítica a la política cultural del Principado
Para el diputado de VOX, la situación de Santa Cristina evidencia la falta de compromiso real del Gobierno de Barbón con el patrimonio histórico. “Mientras los socialistas se dedican a inventarse tradiciones y otras sandeces, nuestro patrimonio histórico, el que de verdad nos define, está abandonado”, señaló el parlamentario.
“Menos llingua y más preservación del prerrománico. Lo que necesitamos es cuidar lo que tenemos y no dejar que símbolos únicos de nuestra historia se conviertan en un ejemplo de desidia y dejadez institucional”, afirmó Javier Jové.